Qué noche más curiosa se nos presentaba ayer. Caro, Paula, sus amigos y yo, con añadidos de última hora (Raquel, Irene y Carmen), con errores al coger el tren (yo), con paseítos por La Rinconada sin conocerla (yo, también) y... ¡con serranitos! ¡Jum!

No tenía grandes expectatitvas del concierto de este señor, la verdad. No conocía apenas su música, sabía que era un hombre respetado y que lleva casi 30 años pateándose los escenarios de medio mundo, pero... Poco más.

Wow. La verdad es que me cuesta encontrar palabras que consigan englobar todas las sensaciones que me provocó este hombre ayer. Nunca imaginé que un concierto gratuito, en un pueblo cualquiera, podría convertirse en un espectáculo de luz y sonido tan impresionante. Además de cantar con un voz preciosa y muy bien modulada, Bosé se movía por el escenario como si hubiera sido parido en él. Igual se contoneaba o enseñaba el culo cual homosexual liberado (vamos a hablar delicadamente, que ya he quedado una vez de homófoba esta semana y no quiero más, gracias), que colocaba su pose de el hombre más viril del mundo al que TODAS las mujeres allí presentes (sí, digo TODAS) querrían tirarse...

Ah, y hablando de los allí presentes. Nunca vi tantas madres juntas, y disfrutando tanto. Carmen y yo nos pusimos a imaginarnos a nosotras en los conciertos de, no sé, Ismael Serrano, Alejandro Sanz, o Bisbal (por decir alguien) dentro de 30 años, chillando como locas...

Para terminar, quería dejar constancia de tres grandes momentos de la noche:

1)
El corazon que Triana va
nunca volvera
Sevilla...
con que pasion te enamorara
y te embrujara
Sevilla...

:) Me acordé de que Amaia la cantó también en el concierto de La Oreja en octubre!!

2)


Y me hablaron de futuros
fraternales, solidarios,
donde todo lo falsario
acabaría en el pilón.
Y ahora que se cae el muro
ya no somos tan iguales,
tanto vendes, tanto vales,
¡viva la revolución!
Reivindico el espejismo
de intentar ser uno mismo,
ese viaje hacia la nada
que consiste en la certeza
de encontrar en tu mirada
la belleza…

¡¡Qué momento, Carmen, qué momento!! La única canción ajena que cantó ayer, y tuvo que ser precisamente esa... Nótese la frase en negrita y en tamaño aumentado, que nosotras entonamos con el puño en alto. (Esa es la exaltación rojo-comunista de la que hablábamos el otro día, pero ahora no viene al caso.)

3) Y por último, momentazo:

Yo seré el viento que va
navegaré por tu oscuridad
tú rocío
beso frío
que me quemará
Yo seré tormento y amor
Tú la marea que arrastra a los dos
Yo y tú
Tú y yo
no dirás que no...
no dirás que no...
no dirás que no...
¡¡Seré tu amante bandido!!

En definitiva, me lo pasé muy muy requete taco de bien. O como dirían las madres allí presentes, guay del Paraguay ;-)

PD: ¡Ah! Se me olvidaba comentar que Miguel Bosé es un plagiador de los cantautores: Señora, Lucía, Qué va a ser de ti y Te amaré... pero se lo perdonamos, ¿verdad Carmen? XD

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