Bien, bien, aquí vuelvo con la tercera entrega, pero sólo porque sé que ya estábais ansiosos por que llegara. Os he hecho esperar un poquito, a ver si mi querida Lena suscitaba más comentarios, pero como veo que aquello está bastante estancado, me lanzo con mi tercera mujer (qué más quisiera yo). Aunque algo me dice que ésta no será a saint of your devotion (porque sois tont@s).

Lucía Jiménez es una actriz española que nació en Segovia hace 28 años. Debutó en 1996 con La buena vida, de David Trueba, en la que hizo un papel bastante decente; supongo que saltó a la "fama" más o menos en la primera temporada de Al salir de clase, allá por 1997. Y allí fue donde yo la conocí, cuando era una polluela de 19 años (y yo una pre adolescente salida de... ¡12!).


A lo largo de estos años, Lucía ha cambiado mucho. He visto bastantes de sus películas, he intentado seguirla, aunque se ha empeñado en desarrollar su filmografía en Italia y Francia y dejar las películas penkas (léase El arte de morir) para España.
Pero hace apenas un año y pico, volvió a la vida con Los dos lados de la cama, que vale, no es un prodigio del lenguaje del séptimo arte (ni siquiera de los musicales), pero tiene una historia lésbica y yo ahí ya pierdo el (poco) criterio xD

A FAVOR: ¿No basta con todo lo que ya he dicho? Lucía Jiménez es un mito erótico-festivo de mi infancia, preadolescencia, adolescencia, juventud y del resto de mi vida, vaya. Y más desde que (se) corren los rumores de que le gustan más unas... en fin, me callo, que esto lo puede leer algún niño. Pero que dicen por ahí que es lesbiana, vamos.

Venga, en serio. ¿Qué me gusta a mí de esta mujer? Pos me parece que más o menos lo mismo que de las otras xD Su pelo, sus ojos, su piel... VENGA YA MER! No me cuentes rollos!! Me estoy fijando en que casi (Paula precisamente no, ¿¿por qué??) todas las tías que pienso poner en este coleccionable de "Las mujeres de Mer" han tenido o tienen algún tipo de rol de lesbiana en el mundo cinematográfico o televisivo. Mm...
El hecho de que sea una muchacha sencillita, española, de pelo castaño (NO me gustan las rubias, ¿cómo tengo que decirlo?) y con pintilla así de guarrilla, me mola más. A ver, no lo puedo evitar. Y al menos ésta no se casa con gilipollas (salvo que se quiera casar conmigo, jiji). Y ya me callo.

EN CONTRA: Al igual que con las anteriores, todos los que tengáis algo en su contra sencillamente es que no tenéis ni puta idea de mujeres. He dicho.

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