M - Tía, nada más que la estrenen tenemos que ir a ver
Babel.
S - ¿Babel?
M - Sí, la última de la trilogía de González Iñárritu.
En qué día se me ocurrió darle esa idea. Qué película más cinematográfica y qué poco hollywoodiense. Si hasta es buena en despertar polémica (sólo hay que mirar los foros de IMDb, en el que igual de feroces son las críticas que los halagos). La verdad es que si yo escribiese ahí tampoco sabría qué demonios poner.
Decía un chico que había sufrido mucho viendo la película y por fin se había dado cuenta de por qué: ninguno de los personajes toma una decisión correcta y lógica sobre los acontecimientos, sino que insisten en equivocarse y caen en un estado de desesperación total. Los niños con el arma, el sobrino de Amelia (Gael), la propia Amelia, Richard (Brad Pitt) ... Quizás la historia de la chica japonesa puede resultar la menos trágica de todas, pues no implica una muerte o una pérdida (al menos no durante la película), sin embargo a mí me resultó la más profunda. Desde el primer momento que podemos ver a Chieko flirteando con chicos y, más tarde, quitándose las bragas en el restaurante - discoteca, pensé que su personaje estaba escrito para nosotros, los occidentales.
Es decir, de entrada, las situaciones que más sentimientos nos provocan, las que nos hacen llorar, son las que se desarrollan en Marruecos, con el accidente; además, también nos indignamos profundamente en la escena en que Amelia y su sobrino cruzan con los niños la frontera de San Diego... Pero la historia de la japonesa, a mí particularmente, me arrancó muchas sonrisas a lo largo de la película... hasta el final.
No quiero reventar finales (aunque esté hablando sin tapujos de la peli), sólo lanzo mi opinión y reflexión del asunto: mirémonos en ella. Aparentemente sólo busca sexo, constantemente, y de una forma no muy elegante precisamente... Pero en el fondo, lo único que quiere es cariño, que alguien la abrace. ¿No es este un retrato (resumido, eso sí) magnífico de la sociedad en que vivimos? ¿No somos todos un poco como Chieko, con todas las comodidades económicas y tecnológicas, y en el fondo, más solos que nunca?
Dice González Iñárritu que Babel es una historia de incomprensiones, de cómo los humanos seguimos viviendo en diferentes mundos y hablando diferentes idiomas, sin entendernos, a pesar de la globalización y la extensión del idioma universal, el inglés... Hasta que no vi la película no entendí lo que quiso decir. Pero lo dijo de forma demasiado suave: Babel es mucho más que una conclusión, como la mía o la suya, es un viaje de dolor y sufrimiento, no sé si es muy recomendable...
Etiquetas: segundo
Besitos a los dos!