Kilométrico Boomer
How many doors had I open and closed? How often had I sneezed?
lunes, mayo 29, 2006
Sé que llego un día tarde, incluso puede que llegue un curso tarde. Ayer no pude llamarte yo, ni escribirte, y es probable que de haber podido hacerlo, tampoco hubiesen salido de mi boca palabras más alegres de las que me escuchaste ayer. Pero sé que me perdonas, la fiebre y eso. Te lo debo.
Ahora mismo tengo una pantalla en blanco delante y muchas cosas que decir, pero no sé decirlas. Mis dedos no quieren escribir, no quieren soltarse, aunque yo los obligue. 9 meses después, aún sigo siendo la misma niña torpe y manazas a la hora de expresarse, la que nunca encuentra la palabra precisa, la sonrisa perfecta.
Básicamente quería escribirte un abrazo. Quería poder fotografiarlo con las teclas, pintar sus trazos con las palabras, pero sé que no puedo. No puedo amenazarte con sacarte de casa a rastras, ni intentar convencerte de que salgas hoy o mañana, y ofrecerme a acompañarte cuando me digas definitivamente que no. No puedo plantarme allí sin esperar a que me lo pidas, porque no me lo vas a pedir pero me lo pides constantemente, yo lo noto y lo escucho, te escucho llamándome, llamándonos. Pero quizá hace tiempo que no te escuchas a ti misma, o al menos no a ese lado de ti misma, a esa otra tú que yo echo tanto de menos, esa de la que te hablaba el sábado, bajo los efectos de la fiebre.
Bajo la fiebre te hablé y te grité y te abofeteé con palabras, y sé que dije muchas cosas que guardaste en el fondo de tu cabeza y que seguramente ignores pasado mañana, o decidas que no tienes demasiado fuerza para ponerlas en práctica. Aún sabiendo eso, te querré igual, aunque seas cobarde o torpe o no tengas coraje suficiente. Aunque así fuera, te querría igual.
Querría igual a esos ojos verdes azulados que últimamente siempre veo perdidos, porque ya cuando me miro no consigo encontrarme detrás, o quizás el reflejo que me devuelven me hace tan fea que hago como que no lo he visto. Soy un pequeño monstruo inquietante tras de tus ojos, alguien que está lejos y no te ve ni te escucha. Alguien que ignora tu soledad de torres de marfil y miseria cubierta de polvo. Aunque pensaras así, aunque pienses así, te querría igual.

Querría igual a ese pequeño cuerpecito rebelde, a tu pelo negro y revuelto, a tu piel clara y suavecita y a tus manos que dan golpecitos en mi espalda cuando te doy un abrazo. Con tus arrebatos y tus ataques de ira, con tus "no puedo evitarlo, me siento así" y tus me siento asao y tus paredes de hielo, y tus intentos de ser cínica conmigo, y tus lágrimas a golpes contra el teclado, y tus llamadas nocturas y diurnas y vespertinas y tus mensajes oportunos y tus mails con fotos o sin ellas. Te querría igual aunque fueras manca o ciega y te quiero ahora que estás un poco inválida, que cojeas al caminar y no sabes donde apoyarte, ahora que estás también un poco tuerta y no ves qué tienes delante ni qué te persigue detrás. Ahora que eres más imperfecta que nunca, ahora que te leo y no eres tú quien escribe, ahora que la pequeña está más pequeña, que se siente encogida en un rincón y me acusa de su soledad y su miedo. Ahora, ahora te quiero más que ayer y más que nunca.

Y ahora me da más igual que me lea quien quiera leer, me da igual ser exagerada porque yo siento que me quedo corta, que no puedo expresar con palabras lo preocupada que estoy por ti, las ganas que tengo de verte sonreír por teléfono, de sentir que tus labios se estiran y te ríes, lo feliz que me hace cuando me llamas desde La Moneda, desde la Sanfe, porque sé que estás con alguien, porque escucho ruido de cervezas y mecheros y sé que no estás sola.

No me importa ser cursi, porque lo que de verdad me gustaría hacer no cabe en este espacio, no cabe en esta pantalla ni en este servidor de blogs, no cabe en un mensaje ni en una llamada telefónica. Ni siquiera en las palabras mágicas, ni en te echos de menos dichos a destiempo o entre susurros o lágrimas. No cabe. Sólo lo tengo yo, aquí, y tú, allí, contigo. Y aunque lo hubieras perdido entre la nube de desastres de tu casa, aunque sufras una amnesia temporal, te querría igual. Entiendes? Te seguiría queriendo aunque fueras el ser más patético penko de la historia.
Ea.
Por cierto, a todo esto.. Felicidades.
9 Comments:
Blogger Little Padawan said...
No tengo palabras. Ojalá alguien me diga alguna vez lo que dices tú en esas impresionantes líneas.

Felicidades al destinatario y felicidades a tí. Por ser así, por ser asá, porque sí.

Mil besos

Blogger Little Padawan said...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

Anonymous Anónimo said...
No sé qué tipo de comment puedo dejarte después de leer un post así, que me ha dejado en ese lugar curioso entre la sonrisa de gilipollas y las lágrimas (de más gilipollas todavía). Tienes la curiosa virtud de colocarme en ese punto justo en más ocasiones de lo que tal vez sería lógico o normal. Será que me conoces.

No sé, como no lo sabía el sábado cuando hablamos, qué decir. Últimamente parece que alguien me hubiera sellado los labios (y no me refiero al puto flemón), y las pocas veces en que sé lo que pienso no me salen las palabras para decirlo. Pero hay a quien no hace falta que le diga nada para adivinarlo todo...

Me gustaría poder decirte que todo ha cambiado, que hoy ha sido un día maravilloso y que de repente vuelvo a ver el arcoiris en el cielo, pero mentiría, y mentirte a ti es tontería. Nunca te creíste mis mentiras, no creo que vayas a empezar ahora. Me gustaría poder decirte todo eso, pero no puedo. Sólo sé que cuando al fin pueda, cuando algo cambie o cuando por fin cambie yo (tendrá que ser más lo segundo que lo primero, intuyo), querré que seas la primera en saberlo. Y tal vez no será así, porque ya sabemos que las circunstancias no siempre acompañan y que nunca se sabe dónde ni con quién te van a pillar los momentos cruciales. Pero aunque tarde minutos u horas o incluso días enteros o semanas en informarte, sé que pensaré en ti, en todas las palabras de apoyo y en las broncas y en los teechodemenos y en las llamadas a todas horas y en las sonrisas tristes que sé que intentas dedicarme aunque yo convierta sonreír en algo tan difícil, aunque no haya sabido darte lo que necesitas -sé que tú también me has necesitado- porque he estado demasiado perdida o porque no siempre he sabido darme cuenta a tiempo... Pensaré en todo eso, y cuando sonría sabiendo que va para largo te lo dedicaré, aunque sea sólo mentalmente.

Por lo pronto, sí que puedo dedicarte la sonrisa que has sido capaz de arrancarme incluso en un día como el de hoy.

Creo que esta noche no te llamaré. No me saldría la voz. Pero te quiero, te quiero, te quiero. Y tú eso ya lo sabes.

Blogger boomer said...
qué curioso, aquí la pequeña zoe (little padawan) pensaba q estábamos peleadas :P y de ahí este post :P
pero nada más lejos de la realidad, verdad cariño? ;-) me alegro de haberte hecho sonreír. ese era uno de los propósitos. ahora quedan otros más grandes, de ésos de adultos. los afrontaremos juntas vale?:)
de nuevo, te quiero! :***

Anonymous Anónimo said...
Jo, yo tambien me creia que estabais peleadas...pero ya veo que no...me alegro, y bonito post, de amor o de lo que sea...

Blogger Pakuito said...
xq dices que soy borde? :S Ahm, y un comment que pondría un huevo en fuego por haberlo escrito y ahora no sale... que ya veo las letras en celeste, ya no salen en blanco, pero queria aprovechar que hubiera mas comments para que no quedara este comment ahi to pena en un post tan elaborao... :P

Anonymous Anónimo said...
...no está sóla, lo sabe aunque no lo crea... aunque aquí no se lo sepamos hacer sentir... En fin..., que es una pnk moruna!!

Anonymous Anónimo said...
por cierto... Mer, el post es maravilloso ;)

Anonymous Anónimo said...
Te equivocas (la mayor parte del tiempo) aunque yo no dé muestras de ello (la mayor parte del tiempo), petarda.
Salvo en lo de que soy una pnk (lo de moruna no sé por qué es, pero bueno, aceptamos barco, no vaya a ser q me acusen de racista), y en lo de que el post es maravilloso.