Imagino que cuando pase un poco de tiempo no contaré los días en función de cuánto queda para veros. Imagino que al final de este año, podré llamar amigos a algunas o alguna de estas personas que me acompañan en esta aventura. Imagino que podré decir que mereció la pena. Imagino que la merecerá. Imagino que el roce hará el cariño y cuando me marche también echaré de menos todo esto. Imagino que, en realidad, no se está mal aquí.
Sin embargo, es tan difícil vivir alejada de todos vosotros, y de mi ciudad...